Visita puerperal tras haber dado a luz : Qué es y cuándo se hace

Una de las cosas que debemos tener en mente una vez hayamos tenido a nuestro bebé, es que las visitas médicas no van a estar únicamente dirigidas al control del recién nacido. La mujer también debe ser evaluada y por ello suele programarse la llamada «visita puerperal», en la que se comprueba que su físico se está recuperando correctamente pero qué sirve además para resolver cualquier dura que surja durante el periodo de cuarentena. Veamos entonces cómo se desarrolla esta visita posparto y en qué momento exacto se realiza.

Visita puerperal tras haber dado a luz : Qué es y cuándo se hace

La visita puerperal es una más de las muchas veces que la mujer acudirá al médico desde el preciso momento en el que se queda embaraza. A lo largo de los nueve meses habrán sido frecuentes las revisiones con el ginecólogo y el médico de cabecera para comprobar qué el bebé y la mujer están en buen estado a medida que avanza la gestación, pero una vez nace el bebé, no solo se hace una primera revisión en el hospital poco antes de que te den el alta por haber dado a luz, sino que lo más normal es que desde tu centro de salud te programen la visita puerperal.

Esta es una visita que se concierta con el ginecólogo la cuál se produce a los 40 días de haber dado a luz, coincidiendo con el periodo que se conoce como «puerperio» o «cuarentena». Una visita que de alguna manera sirve para revisar que la madre está bien semanas después de dar a luz.

Como hemos mencionado, nada más dar a luz, en el hospital se comprueba el estado del útero de la mujer, si tiene algún tipo de pérdida, como evoluciona la curación de la  episiotomía o cesárea (en el caso de haberse sometido a uno de estos procedimientos) o cómo están las mamas para poder dar el pecho al bebé, así mismo se dan consejos sobre ejercicios para fortalecer el suelo pélvico. Pero algún tiempo después del alta, se produce una importante visita ginecológica que es a la que nos referimos: la visita puerperal.

En esta visita, el ginecólogo llevará a cabo una revisión completa de la mujer tras dar a luz, de modo que de alguna manera se vuelve a hacer una revisión similar a la que posiblemente nos hicieron en el hospital y que básicamente consiste en:

• Una exploración general, así como un tacto vaginal y una espectroscopia (que consiste en exploración de la vagina con un espéculo).
• Comprobar que el útero esté normalmente contorneado, es decir, que haya vuelto a su tamaño anterior al embarazo.
• Comprobar la cicatrización de la episiotomía o la de la cesárea.
• Valorar el grado de tonicidad del músculo perineal y enseñar, si la mujer aún no los conoce, los mencionados ejercicios de gimnasia perineal con los que podrá recuperar el tono del suelo pélvico algo que resulta vital para en el futuro tener pérdidas de orina, o también que se sienta malestar en la espalda o dolor cuando se mantienen relaciones sexuales.

Además de estas pruebas, es posible que el ginecólogo decida realizar otro tipo de pruebas como por ejemplo, el examen o prueba de Papanicolaou, que corresponde a una citología vaginal que se realiza para detectar si existen células anormales tras el parto.

Dependiendo de cada caso además, también es posible que se solicite una analítica de sangre con el fin de evaluar las condiciones generales de salud y detectar así un posible caso de anemia, algo que afrontan muchas madres durante la lactancia y tras dar a luz.

Evaluación psicológica y otras cuestiones

Además, durante el examen ginecológico posterior al parto, el médico también evaluará las condiciones psicológicas de la nueva madre (para identificar cualquier signo de depresión posparto ) con lo que también hablará sobre la reanudación de una vida sexual normal. De hecho, en la fase posparto, muchas mujeres pueden tener dudas y temores al respecto, dado que en los primeros meses después del nacimiento del recién nacido y debido al proceso de lactancia, se produce una disminución de estrógenos que puede conducir a la sequedad vaginal, pero también una disminución del deseo , lo que puede llevar a cierta incomodidad en las relaciones con la pareja.

El ginecólogo puede recetar un lubricante o incluso mejor un suplemento y asesorar a la mujer , incluso sobre anticoncepción . De hecho, durante esta fase tan delicada , no es posible predecir con certeza cuándo la mujer volverá a ser fértil . Por este motivo, el ginecólogo suele sugerir la adopción de un método anticonceptivo , como el condón , el DIU o la píldora (algunos son compatibles incluso con la lactancia materna ).

En definitiva, la visita puerperal no deja de ser una visita o revisión de lo más común que además servirá a la mujer para resolver cualquier duda que pueda tener con respecto a su físico tras el parto, sus emociones si bien el hecho en sí de dar a luz y tener a un bebé puede ser un periodo bastante duro y en algunos casos graves puede conducir a la conocida depresión posparto.